BRL: El Real brasileño será una de las mejores monedas de mercados emergentes este año

  • Volver al blog
  • Análisis del Mercado de Divisas
    Análisis del Mercado de Divisas>Special Reports
    Análisis del Mercado de Divisas|Comercio Exterior
    Análisis del Mercado de Divisas|Sobre Ebury
    Casos de Éxito
    Comercio Exterior
    Comercio Exterior|Finanzas
    Comercio Exterior|Sobre Ebury
    Eventos
    Finanzas
    Finanzas|Fintech
    Finanzas|Sobre Ebury
    Fintech
    Fintech|Sobre Ebury
    Fraude
    Prensa
    Sobre Ebury
    Sobre Ebury>Eventos
    Special Reports
    Uncategorized>Reuniones BCE
  • Latest

9 abril 2019

Autor
Enrique Díaz-Álvarez

Chief Risk Officer at Ebury. Committed to mitigating FX risk through tailored strategies, detailed market insight, and FXFC forecasting for Bloomberg.

El Real brasileño (BRL) llegó a un nuevo mínimo histórico frente al Dólar estadounidense en septiembre. Esto se debió en parte a la venta masiva que sufrieron casi todas las monedas de mercados emergentes inducida por lo sucedido en Turquía y también a la incertidumbre política que condujo a las elecciones generales de Brasil en octubre. No obstante, se han recuperado gran parte de estas pérdidas gracias al resultado de las elecciones y el alto nivel de los tipos de interés reales en Brasil.

La incertidumbre política había nublado significativamente la perspectiva real durante gran parte de 2018. El resultado de las elecciones, con la victoria para Jair Bolsonaro, ayudó a aliviar dicha incertidumbre. Uno de los mayores desafíos para Bolsonaro estará en cómo enfrentar los recientes problemas económicos de Brasil. Brasil emergió de una de sus recesiones más profundas en décadas en 2017, después de que la economía se hubiera contraído en cada trimestre durante dos años completos. El ritmo de la recuperación ha sido lento, aunque el crecimiento intertrimestral se aceleró a 0,8% en el tercer trimestre del año, lo que ha brindado cierta asistencia al BRL. La demanda interna sigue siendo uno de los impulsores clave de la economía, ayudada, en parte, por la medida del gobierno de permitir que los trabajadores se retiren gracias a un fondo de indemnización que inyectó aproximadamente 14 mil millones de dólares a la economía.

La balanza comercial del país se ha dirigido, en gran medida, en la dirección correcta desde principios de 2015 y ha registrado constantemente excedentes saludables en todos los meses desde marzo de 2015. Un BRL bastante débil ha ayudado a impulsar las exportaciones, aunque el reciente y débil crecimiento global es un motivo de preocupación. Los recientes datos PMI también han sido alentadores. El índice de fabricación ha estado en territorio expansivo en todos los meses desde junio, mientras que el PMI de servicios aumentó a su nivel más alto en casi un año en febrero. Ahora se estima que la economía de Brasil crecerá alrededor de un 2,5- 3% en 2019, una modesta revisión a la baja de estimaciones anteriores pero a un ritmo más rápido que en 2018.

Una reducción en la presión inflacionaria permitió al Banco Central de Brasil (BACEN) reducir el tipo de interés en varias ocasiones en 2017 y principios de 2018. Los tipos se redujeron más recientemente en la reunión de marzo de 2018 del banco central a un nuevo récord de 6,5%, aunque la política se ha mantenido sin cambios desde entonces, con la inflación ahora estable dentro del objetivo de inflación de 3- 6% del BACEN. La inflación general llegó al 3,9% en febrero, por debajo del punto medio del rango objetivo del banco. Este es un nivel bastante alentador, dado que Brasil tradicionalmente ha luchado para domesticar los precios desbocados. La baja inflación, ayudada por la recuperación del BRL, debería aliviar la presión sobre el banco central para modificar su política monetaria en los próximos meses. En medio del bajo crecimiento de los precios, el tipo de interés real sigue siendo firmemente positivo, en exceso del 2%. Esto debería significar que el Real sigue siendo una de las monedas mejor soportadas en la región, desde nuestro punto de vista.

Las reservas de divisas en Brasil siguen siendo una fuente de estímulo adicional y deberían proporcionar al banco central un amplio margen para intervenir en los mercados de divisas a fin de evitar una depreciación del Real. En la actualidad, las reservas equivalen a una cobertura de importación masiva de 25 meses. Este número ha disminuido ligeramente en los últimos años, aunque esto se debió, principalmente, a un aumento en las importaciones y las reservas de divisas siguen siendo enormes después de años de fortaleza del BRL.

Creemos que el Real brasileño será una de las monedas de mercados emergentes con mejor desempeño este año. Un alivio en la incertidumbre política, los tipos de interés real, un gran cesto de reservas de divisas y un déficit de cuenta corriente pequeño aseguran que el BRL finalizará el año en torno al nivel de 3,50 frente al Dólar estadounidense, desde nuestro punto de vista.

Redes Sociales